Cuando era mucho más joven, solíamos cantar una canción en la iglesia que decía así:
Cuente sus bendiciones, nómbrelas una por una.
Cuente sus bendiciones, vea lo que Dios ha hecho.
Cuente sus bendiciones,
Nombrelas una por una,
¡Cuente sus muchas bendiciones, mire lo que Dios ha hecho!
¡A veces contar nuestras bendiciones es mucho más fácil de decir que de hacer! Cuando la vida nos lanza una curva, o cuando algún trauma o tragedia entra en nuestro espacio, no siempre es tan fácil encontrar la bendición en ello. De hecho, a menudo ni siquiera QUEREMOS ver una bendición en ello. ¡Solo queremos que las cosas vuelvan a ser como eran antes de que se interrumpiera nuestra paz!
La semana pasada hablamos sobre cómo encontrar un momento de tranquilidad para enfocarnos en Dios ayuda a restaurar nuestra paz. El segundo paso que puede ayudarnos a redescubrir la paz es la gratitud. Por definición, la gratitud es “…la cualidad de estar agradecido; disposición para mostrar aprecio y devolver bondad.” La gratitud es más que un sentimiento agradable cuando las cosas van bien. ¡Es fácil sentirse agradecido cuando la vida es buena! ¡No es tan fácil elegir ser agradecido cuando se enfrenta a un trauma o dificultad! Pero el hecho es que la gratitud es una elección. La gratitud requiere quietud y reflexión intencionales que nos lleven hacia un lugar de paz.
Hay una gran cantidad de investigaciones científicas que indican que la gratitud (o agradecimiento) tiene el poder de energizar, sanar y traer esperanza. La investigación también muestra claramente que la gratitud nos ayuda a sobrellevar las crisis y que las personas agradecidas son más resistentes al estrés tanto en la vida cotidiana como en tiempos de crisis importantes. Reformular su situación y verla a través de una lente de agradecimiento en realidad cambia la química de su cerebro y contribuye a una mayor sensación de bienestar.
Consideremos por un minuto las tres partes para cultivar una mentalidad de gratitud. La primera es reconocer que hay cosas por las que podemos estar agradecidos. Tras la muerte de un cónyuge, esta primera parte suele ser la más difícil. Durante esos primeros meses después de la pérdida de su esposo, es casi imposible concentrarse en cuáles podrían ser las bendiciones en medio del dolor. Superar este obstáculo requiere tiempos intencionales de quietud y espera a que esas cosas buenas vengan a la mente. ¡¡No estoy diciendo en absoluto que debamos estar agradecidos por la muerte de nuestro esposo!! Sin embargo, si miramos, hay cosas que coexisten con nuestro dolor que nos recuerdan el amor y el cuidado de Dios.
La segunda parte es reconocer o nombrar aquellas cosas por las que estamos agradecidos. Recientemente compré un "diario de gratitud", con el objetivo de escribir tres cosas todos los días por las que estaba agradecido. ¡Los primeros días fueron similares a dar la vuelta a la mesa en la cena de Acción de Gracias para decir por qué estamos agradecidos! Mi casa, mi coche, mi perro, la ropa y la comida eran ejemplos dignos. Pero después de unos días, ese pozo se secó y comencé a tener que pensar un poco más profundo para continuar encontrando esas tres cosas diariamente. Empecé a ver la miríada de bendiciones que existen en mi vida. Algunos eran grandes y visibles, pero otros eran pequeños y menos visibles. Sin embargo, reconocer a cada uno y darle un nombre empezó a cambiar algo en mi corazón.
La tercera parte es expresar aprecio por cada una de las cosas que hemos nombrado. Escribir notas de agradecimiento por obsequios y actos de bondad se está convirtiendo rápidamente en un arte perdido en nuestra cultura. ¿Sabías que hay algo que realmente cambia en nuestro cerebro cuando expresamos aprecio? No me pidas que explique toda la ciencia aquí, pero puedes buscarlo en Google y encontrar docenas de artículos fascinantes sobre el tema. Entonces, ¡escribe esas notas de agradecimiento! ¡¡Son buenos para ti!!
Todo esto para decir que tener la intención de pasar unos momentos tranquilos en la Presencia de Dios y tener la intención de nombrar las cosas por las que estamos agradecidos comienza a reenfocar nuestro pensamiento. ¡Tomarse el tiempo para expresar aprecio por estas cosas comienza a cambiar la química de nuestro cerebro! Estos pasos comienzan a movernos de un lugar de ansiedad y miedo a un lugar donde podemos recuperar nuestra paz sin importar las circunstancias en las que nos encontremos.
Si está ansioso o temeroso como resultado de haber enviudado, lo animo a dar el siguiente paso de nombrar las cosas por las que está agradecido. Esta mentalidad reenfocada lo acercará más a Dios y comenzará a experimentar más de Su paz y seguridad. "Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús". — Filipenses 4:6-7Do not be anxious about anything, but in everything by prayer and supplication with thanksgiving let your requests be made known to God. And the peace of God, which surpasses all understanding, will guard your hearts and your minds in Christ Jesus.” — Philippians 4:6-7
Como siempre, sus comentarios son bienvenidos y pueden enviarme un correo electrónico a sheryl@freshhope.us.
1 Comentarios
Thanks for the reminder to be thankful. I went through this when I was taking care of Lanny and so tired.
I was laying on the couch and so discouraged and God said, “thank me”. I said, ” what for”? And He said ask me to show you the blessings I given you through. I was obedient and did so.
I was flooded with all sorts of things to say “thank you” for.
First there was the people who surrounded us with support and prayers. Then there was the VA and all the benefits that came our was. There were so many other things I could mention.
There I was, for the first time in a long time, flooded with joy and peace and thankfulness.
This happened again after Lanny died and your post reminded me again to be thankful.
I’m going through a dry spell and this I know is what I need to get me back on track.
“I’m thankful, Jesus, for Sheryl and and this reminded you gave me through her, to thank you for what you have done and are doing. In Jesus name “.
Bless you.