Lanzando la lista de tareas

LANZANDO LA LISTA DE TAREAS

¿Ya han pasado cinco años desde que iniciamos esta década? Si examinamos el calendario, ¡definitivamente es cierto! Estamos en enero del 2025 con un nuevo año en el horizonte. Hay algo en esos primeros días de un nuevo año que nos obliga a detenernos lo suficiente para respirar profundamente. Nuestros pensamientos pueden desviarse hacia las semanas y meses que tenemos por delante, tal vez preguntándonos qué alegrías y tristezas nos están esperando a ser experimentadas. Miramos hacia adelante con expectativa a los maravillosos eventos que sabemos que llegarán este año: bodas, nuevos bebés, graduaciones, viajes e incluso los libros que hemos estado esperando leer o los pasatiempos que hemos decidido comenzar.

Sin embargo, la vida nos ha enseñado una realidad diferente y bastante desagradable. No todo es maravilloso y emocionante. Debido a que vivimos en un mundo roto, el dolor y la pérdida también son parte de nuestra experiencia cotidiana. Con demasiada frecuencia, nuestros pensamientos viajan a los recuerdos y se centran en la pérdida. La tristeza puede comenzar a consumir nuestras emociones y la soledad rápidamente sigue los pasos del aislamiento.

Históricamente hablando, el año nuevo ha sido un momento en el que hacemos propósitos, fijamos nuevas metas y respiramos profundamente, dándonos la pausa entre lo que fue y lo que aún podría ser posible. Si bien los objetivos realistas y los planes estratégicos son algo bueno, la mayoría de nosotras nos preparamos para el fracaso al enumerar cosas que nunca, jamás, podremos lograr. Por lo tanto, nos encontramos en la mitad del primer mes del año habiendo cambiado ya nuestro plan, o tal vez renunciando a él por completo.

Confieso que soy una profesional de hacer listas. Así es como logro cosas... o no las logro. Es como mido mi progreso y éxito... ¡o la falta de ellos! Por eso, el Año Nuevo a menudo me encuentra pasando tiempo haciendo listas de todas las cosas que espero lograr en el año entrante. Si bien esto puede ser muy inspirador, también es desalentador a medida que pasan las semanas y los meses, ¡y la lista no parece acortarse!

Una mañana de la semana pasada me encontré con algo en uno de mis pequeños devocionales diarios (¡sí, hay muchos!) que me gustaría compartir con ustedes:  “¡No viniste con una lista de cosas por hacer de parte de Dios!”  ¿Dónde aprendimos esta técnica para medir nuestro éxito? ¡Sin duda no de nuestro amoroso Padre Celestial! Él nos dice que nos ama simplemente porque somos Sus hijos… ¡no porque cumplimos con todo lo que tenemos en nuestra lista de tareas! ¡Ni siquiera porque seamos realmente buenos en cumplir con nuestras resoluciones de Año Nuevo! ¡Qué pensamiento tan liberador! Él me ama simplemente porque…

De hecho, Él nos dice que Él es quien está haciendo algo. Considere este versículo de Isaías:

“¡Voy a hacer algo nuevo! Ya está sucediendo, ¿no se dan cuenta? Estoy abriendo un camino en el desierto y ríos en lugares desolados.” – Isaías 43:19

 ¡Este versículo se explica por sí solo! Como viudas, nos hemos encontrado en un territorio inexplorado y, a menudo, inesperado. A veces se ha sentido como un desierto y una tierra desolada; en otras palabras, un desierto donde no tenemos ningún propósito ni dirección. Dios nos está diciendo aquí que Él está obrando y haciendo algo nuevo en cada una de nuestras vidas. ¡Nuestra única responsabilidad es estar buscándolo hasta que veamos lo que Él está haciendo!

¿Cómo descubrimos ese nuevo propósito y destino que Dios está abriendo ante nosotras? Una manera es mantener nuestros ojos y oídos enfocados en Él. Nunca escucharemos Su dirección ni veremos lo que Él está haciendo si no estamos escuchando y atentas. En nuestros grupos de Refocusing Widows, pasamos tiempo hablando sobre este proceso, aprendiendo más sobre nuestra singularidad y descubriendo qué es lo próximo en este viaje. Durante este nuevo año, hagamos que nuestra única Resolución sea descubrir la “cosa nueva” que está surgiendo para que podamos decir: “¡Sí, Dios! ¡Lo veo!”.

Como siempre, sus pensamientos y comentarios son bienvenidos aquí o puede enviarme un correo electrónico a sheryl@freshhope.us. Si está buscando un nuevo propósito y un camino para seguir adelante, considere unirse a uno de nuestros grupos de Refocusing Widows, ya sea en persona o en línea. Puede registrarse en www.refocusingwidows.org/Groups. ¡Esperamos conocerle!